Blog Destacado Uncategorized

6 formas de conectarnos con Los Ángeles

FGZO2582

6 formas de conectarnos con Los Ángeles

Éstas son algunas de las maneras más habituales en las que puedes conectar con los ángeles a través de tus sensaciones:

✨Notar un aroma a flores cuando no hay ninguna cerca.

✨Sentir que alguien te ha tocado, a acariciado tu pelo, te ha dado un empujoncito, te ha protegido, te ha arropado o te ha abrazado.

✨Advertir un cambio en la presión del aire, una sensación de tensión alrededor de la cabeza, una sensación de que algo te ha golpeado en la frente, una impresión de alguna esencia espiritual que se mueve a través de tu cabeza o una sensación similar de que te arrastran bajo el agua.

También puedes experimentar:

✨Cambios en la temperatura del aire.

✨Una repentina sensación de euforia o de felicidad.

✨Una corazonada de que esa experiencia es surrealista (Aunque no estés dispuesto a compartirla con los demás). 

Las verdaderas experiencias con los ángeles son cálidas, seguras y confortables: mientras que las falsas te hacen sentir frío, enojado y asustado.

También puedes utilizar tus impresiones para “probar” una sensación intuitiva y advertir cómo reaccionas. Por ejemplo, supongamos que sientes la necesidad imperiosa de mudarte a una nueva zona. Sin embargo, mantienes un conflicto interior y te preguntas cómo podrías aceptar ese cambio tu familia, a tus amigos y a tu carrera profesional. Aunque algunos de esos factores no te resultan demasiado claros, puedes “probar” tu futuro y hacerte una idea más clara a través de tu orientación Divina.

Mientras imaginas como sería seguir viviendo donde ahora te encuentras, concéntrate en tus sentimientos. ¿Tu corazón está lleno de alivio, tristeza, alegría o de cualquier otra emoción? ¿Alguna parte de tu cuerpo se siente tenso relajada como respuesta a la imagen mental? 

A continuación, compara tus sensaciones físicas y emocionales cuando te imaginas que está realizando esa mudanza. Tus sentimientos son un indicio muy preciso de los deseos de tu alma y de tu voluntad Divina, que es la misma que la voluntad de Dios.

Deja tu comentario aquí

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *